Cómo conocer mis competencias laborales: soft skills y hard skills

Las empresas buscan trabajadores competentes, es decir, encontrar aquellos que saben, quieren y consiguen los mejores resultados. 
Ya no buscan sólo personas con conocimientos sino personas que se adapten a los cambios continuos del mercado, que sepan moverse en su entorno, que trabajen bien con otros y consiguen los objetivos.
 

Y es, en este punto, dónde debemos tener clara la diferencia entre habilidades blandas (soft skills) y habilidades duras (hard skills).

¿Quieres conocer las diferencias?

Las habilidades blandas o soft skills

Todo lo que somos capaces de hacer se llaman habilidades blandas, son las aptitudes relacionadas con tus comportamientos, metodología de trabajo, interacción con los demás… 
Esto hace que quienes las tengan, trabajan bien en equipo, están orientados a resultados y son flexibles en sus relaciones sociales. Hay una conexión de estas habilidades con la inteligencia emocional (tan de moda en estos momentos, por fin!!!!) y que permite gestionar satisfactoriamente las emociones para relacionarse positivamente con los demás.

En la actualidad, las empresas se centran en estas competencias blandas, las que hacen que nos diferenciemos del resto de candidatos que tienen la misma formación y experiencia que nosotros.

  • Son intangibles, más difíciles de evaluar, dan una ventaja competitiva y diferencian del resto.
  • Van más allá de los conocimientos relacionados estrictamente con tu profesión, son las cualidades que hacen cumplir de forma eficaz las funciones del puesto de trabajo.
  • Ten en cuenta que cuántas más poseas mayores serán tus probabilidades de tener éxito en futuras candidaturas de empleo.
  • Son habilidades que puedes transferir a cualquier puesto de trabajo, las vas a poner en práctica siempre, por lo que candidatos con habilidades blandas serán empleados muy adaptables.
Ejemplos de habilidades blandas (hay muchas más):
  • Comunicación asertiva
  • Empatía
  • Resolución de conflictos
  • Inteligencia emocional
  • Actitud positiva
  • Liderazgo
  • Trabajo en equipo

Las habilidades duras o hard skills 

Son las competencias que permiten que te desarrolles de manera satisfactoria en la empresa donde trabajas, son las competencias profesionales técnicas que vas adquiriendo a través de tu formación y/o experiencia.

Las habilidades duras son competencias profesionales técnicas específicas que complementan un puesto de trabajo.
  • Se pueden medir mediante pruebas técnicas.
  • Se adquieren a través de la formación (estudios técnicos, universitarios, especializaciones, etc.) y la experiencia profesional.
  • Hay que demostrarlo con certificaciones, títulos profesionales, referencias laborales, entre otros.
  • En una oferta de empleo, son requisitos imprescindibles.
  • La formación continua te va a permitir seguir adquiriendo o potenciando estas hard skills, sobre todo, en este mercado laboral tan cambiante.
  • Son competencias muy variadas, ya que están en función del puesto de trabajo. Por ejemplo, para un delineante la habilidad dura será que tenga conocimientos de dibujo técnico y AutoCAD mientras que para un programador será que domine diferentes lenguajes de programación.
Ejemplos de habilidades duras (hay muchas más):
  • Habilidad en el manejo de herramientas digitales.
  • Conocimientos en lenguajes de programación.
  • Habilidades de contabilidad.
  • Dominio de una lengua extranjera.
  • Habilidades en el diseño gráfico.
  • Gestión de personas.
  • Gestión de proyectos.

¿Cuáles son más importantes?

Pues creo que ya lo sabes.

 
Las dos sirven para destacarte en un proceso de selección donde te ajustas al perfil del puesto de trabajo, ya que se complementan: las habilidades duras son los conocimientos necesarios para el puesto de trabajo y las habilidades blandas es la parte emocional, la manera de comunicarse y relacionarse con otros.

¿Cómo puedo demostrar mis habilidades blandas?

Buena pregunta porque de estas habilidades puede que no se tengan certificación y decimos que las tenemos.
Ahí aparece la entrevista por competencias.
Es un modelo de entrevista que se realiza para conocer, a  través de diferentes situaciones, cuál es tu desempeño laboral.  

Sabes que tienes una habilidad blanda, si tienes un ejemplo para explicarla 

Si has puesto en tu CV que eres una persona con capacidad de resolución de conflictos, el entrevistador querrá saber cómo en el puesto de trabajo al que postulas lo pondrías en práctica. Para ello, te puede preguntar:

  • ¿Recuerda un problema al que se enfrentó en el pasado? Explique cómo actuó para solucionarlo.
En el caso que tu competencia sea organización y/o planificación, te podría preguntar:

  • ¿Cómo identificas en tu día a día qué tareas hacer primero
    y cuáles después, es decir, cómo priorizas para saber por dónde empezar?
Así que, mucho cuidado con poner en el CV o Carta de presentación habilidades que yo llamo «de corta y pega»: buscamos en internet habilidades y ponemos 3 ó 4 de las que más nos suenen. 

Te propongo un ejercicio para conocer tus competencias:

Coge un cuaderno y bolígrafo, piensa y escribe las competencias técnicas (hard skills) que necesitas para tu trabajo, las tareas que haces y qué competencias blandas (soft skills) necesitas para hacerlo bien. 

¿Y si no he trabajado? Buena pregunta, pues piensa en tus estudios, en prácticas no laborales o en tu vida diaria donde has puesto en marcha esas competencias.

Acuérdate que para demostrar estas competencias debes tener ejemplos de cómo lo pones en práctica en tu puesto de trabajo, así demuestras que aportas a la empresa si te contratan.

Si tienes dificultad para conocer tus competencias blandas y duras:

  • Busca ofertas de empleo de tu perfil profesional en portales de empleo.
  • Pregunta a personas que te conozcan, que trabajan o han trabajado contigo y haz un listado de las competencias en las que destacas.
  • Ver fichas profesionales de vuestra profesión. Estas fichas nos van a dar a conocer nuestra profesión: estudios, funciones, competencias, entorno profesional,…
Con este ejercicio vas a tomar conciencia de aquellas competencias profesionales que tienes (fortalezas) y aquellas que tienes que debes mejorar (debilidades), siempre pensando en tu profesión. 😀👍

Hay que dedicarle tiempo a este análisis, ya que el paso siguiente es plasmarlo en la Carta de presentación y en el CV (herramientas de empleo que enviamos a las empresas) para demostrar en la Entrevista de trabajo que tú eres la persona que necesita la empresa, aportando valor y demostrando (ya sabes con ejemplos) que tienes las competencias que ellos necesitan.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sígueme en Linkedin para más información sobre desarrollo personal y mejora de la empleabilidad.

Contacto

Si quieres conocerme mejor o descubrir nuevas estrategias de búsqueda de empleo contacta conmigo con un click.
© María José Peñalver. Todos los derechos reservados.